martes, 8 de mayo de 2012

Ali Ahamada

A lo largo de la historia, la de portero ha sido una demarcación en la que la mayoría de equipos ha preferido confiar en guardametas con muchos partidos disputados y una larga experiencia a sus espaldas. Esa circunstancia, como otras muchas en el mundo del fútbol, ha ido variando con el transcurso de los años, y en la actualidad no es nada extraño ver a cancerberos de temprana edad defendiendo marcos de equipos importantes. Uno de los que más proyección posee lo encontramos en el sur de Francia. El Toulouse de Alain Casanova, es desde hace tiempo uno de los equipos más regulares del campeonato galo y se encuentra inmerso en la lucha por obtener un billete que le de derecho a jugar competición europea la próxima temporada. Del cuadro tolosano podemos destacar jugadores codiciados por grandes escuadras del viejo continente, como son los casos de MoussaSissoko, Étienne Capoue o Franck Tabanou, todos ellos muy jóvenes y con un futuro realmente prometedor. Pero sin dudas, la gran sorpresa esta temporada en el TFC ha sido la irrupción en la portería del meta Ali Ahamada, que a sus escasos 20 años, (19 de Agosto de 1991, Martigues, Francia), se ha hecho con un puesto de titular indiscutible, convirtiéndose en una de las grandes revelaciones de esta Ligue 1.

La carrera del joven Ali Ahamada no destaca hasta el momento por su complejidad en cuanto a recorrido se refiere, ya que solo ha militado en dos clubes, el modesto Martigues de su localidad natal, donde comenzó a jugar al fútbol, y posteriormente en el Toulouse, donde arribó en 2009 para, en principio incorporarse a los escalafones inferiores, con la idea de terminar de formarse, y luego pasar al cuadro profesional. Y así fue, haciendo su debut con el primer equipo en Febrero de 2011, en un encuentro de Ligue 1 ante el Rennes, en el que saltó al campo debido a la lesión del entonces portero titular Marc Vidal. Se puede decir que Ahamada aprovechó su oportunidad a la perfección, ya que hasta el final de la temporada disputó un total de 8 encuentros, en los que dejó muy buenas sensaciones, lo que le valió para pasar definitivamente al primer plantel. Desde el principio de esta campaña se ha convertido en un fijo en los esquemas del técnico Alain Casanova, disputando los 35 encuentros del campeonato liguero, en los que ha dejado su portería invicta en un total de 18 ocasiones. El cuadro tolosano tiene bien atado al cancerbero de Martigues, al que le ha extendido un contrato hasta Junio de 2015. El guardameta es un fijo en las últimas convocatorias de la selección sub-21 francesa, con la que ya ha disputado 6 encuentros.

Ali Ahamada es un guardameta que desde un primer momento llama la atención, ya que sus 189 centímetros y sus 83 kg de peso destacan de forma extraordinaria bajo los palos de la portería del TFC. Fuerte y potente, su desarrollada corpulencia física no le priva para tener una notable agilidad de movimientos, lo que unido a sus buenos reflejos le hacen ser un portero muy difícil de batir. Seguro en el blocaje, aunque en ocasiones lo hace de forma no demasiado heterodoxa, pero si eficaz, intenta en todo momento atrapar el balón de primeras para no conceder segundas oportunidades. Muy sobrio y regular en todas sus intervenciones, transmite una gran seguridad. Uno de los aspectos en los que debe poner más enfasis para mejorar es el juego por alto, donde a veces sale algo alocado y precipitándose. Diestro de pierna, posee un potente golpeo de pelota con los pies, buscando siempre complicarse lo menos posible. Muy atento y metido en el partido en todo momento, su capacidad de concentración es uno de sus puntos a destacar, teniendo en cuenta su juventud, algo que tampoco le supone ningún impedimento para dar órdenes con firmeza a sus compañeros de zaga. Rápido en las salidas, ha demostrado manejarse muy bien a la hora de cubrir portería en el uno contra uno ante el delantero. Lo mejor, además del gran rendimiento que está demostrando, es su margen de mejora, lo que le convierten en uno de los porteros más prometedores del país galo. A la vez que sigue creciendo como jugador, los aficionados del Toulouse disfrutan, a base de paradas, estiradas y serenidad, de la pantera del cuadro blanquivioleta.